viernes, 24 de noviembre de 2017

***Nos besábamos en cada esquina***

***Besándonos en cada esquina***
Más de una vez nos fuimos de capiusa,
le torcidos el brazo a la rutina,
nos besábamos en cada esquina
celebrando la indiciplina,
pensando que nadie nos veía
así fue aquel primer amor.

De pequeñas cosas hacíamos una fiesta
tus suspiros eran la orquesta,
tu le ponías música a mi canción;
tu con la calcetas arremangadas,
con la mochila en la espalda
luciendo esa falda escolar.

Nos besábamos en cada esquina
con pasión de niños, con dulzura
el elixir de esa locura que la activa
el primer amor...
Locura que nunca más encontrará cura
y al final es el mejor antídoto contra
la depresión.

Nos besábamos en cada esquina
sin pensar si tu padre nos sorprendería
y pensaría, quién es ese desaforado
que camina a su lado, quién es ese
susodicho que besa a mi primcesa,
¡Ojalá  sea solo un capricho!
pues yo no quiero como yerno
a ese bicho.

Nos besábamos en cada esquina
desafiando a tus pretendientes
que nos saludaban a regaña dientes,
esperando que te pusieras los lentes
y te dejarán ver lo que la miopía
te impedía.

Nos besábamos en cada esquina
pues cada esquina tendría nuestra huella,
los rastros que aquel amor primero,
el que fue verdadero, aquel que es mas
que pura ilusión.
Oxwell L'bu Copyright 2017

jueves, 16 de noviembre de 2017

Cuando éramos patojos

"Cuando éramos patojos"
Cuando éramos patojos, no existía la distracción del celular y la mejor manera de hacer amigos, era el iniciar una conversación, sin importar la ocacion.

Cuando éramos patojos, cualquier esquina era el mejor lugar para una conversación, cualquier banqueta era una hemoroteca donde encontrábamos más que entretenimiento, la compañía para celebrar el día. Nuestras mayores alegría estaban en las cosas triviales y sencillas, esas que acarician el corazón.

Cuando éramos patojos cualquier ocacion era propicia para compartir, quizás las nuevas generaciones de nosotros se podrán reír, porque en nuestras vidas no había tecnología  y es así, pero conocimos la alegría.
Oxwell L’bu Copyright © 2017

martes, 14 de noviembre de 2017

"La tele de todos"

"La tele de todos"
Se sentaba frente al televisor y empezaba a zapear, matando el tiempo...A veces en la sobre abundancia, se pierde el encanto, de aquello que tanto se deseó.

Han quedado atrás aquellos años, en que solo habían 3 canales de televisión, en los que sólo uno o dos hogares en la cuadra tenían tele.  Esos tiempos cuando era una bendición, que te dieran permiso de ver, un programa de televisión.

Aquello más que una limitación era una estupenda ocacion, para compartir con los cuates de la cuadra. Aquellas reuniones eran una fiesta, donde la orquesta, eran las risas de los patojos, que como piojos, se sentaban en torno al televisor...

Quien no recuerda a don Migue, a don Max o a a ese señor a todo dar, que nos invitaba a su hogar y su señora, dándonos la bienvenida, con la advertencia ¡Patojos no me vayan a ensuciar! Sino no los volvemos a invitar.

Como olvidar aquellos primeros amores de televisión, que no eran más que una boba ilusión  o aquel suspenso y emoción de chiquillo, viendo aquella película o la serie de moda y justo cuando estaba de lo mejor,  venía el apagón, que usualmente dañaba alguno de los tubos y nos dejaba sin televisión, por un mes.Entonces la sala volvía a estar vacía y las calles llenas de patodos retozando, hasta que un día, alguíen gritaba a todo pulmón ¡Ya arreglaron la televisión!
Oxwell L’bu Copyright © 2017

miércoles, 11 de octubre de 2017

***Ls tiendas de mi barrio***

**Las tiendas de mi barrio***
Esas tiendas de mi barrio,
donde se iba a comprar,
lo que se iba a necesitar,
para el consumo diario,
parecían no tener horario.

Pues estaban abiertas,
desde antes de amanecer
y no cerraban hasta
bien entrado el anochecer;
exhibían chucherias en frascos
gigantes de vidrio, en sus estantes
había de todo lo imaginable
y el tendero era siempre muy amable.

Fiado o de contado
se compraba el pan sagrado,
la libra de azúcar, la Incaparina
o la bolsita  de café;
el tendero fiaba de buena fe,
aunque a veces perdía la cuenta
y la ganancia no sabia a
donde se fue.

Las mamas siempre escogían,
el peor momento para mandar
al patojo al mandado,
justo cuando su programa
favorito había empezado;
pero a regañadientes
salian disparados...
Con la promesa de poder
comprar alguna chuchería,
o la amenaza de que
si no iba, no comía.

Como olvidar las tiendas
pintorescas de mi barrio,
donde igual uno se podía
encontrar, con la doña
que no paraba de hablar...
con el amigo para ir a vacilar,
o con la doncella de quién
te ibas a enamorar.
Oxwell L’bu Copyright © 2017

jueves, 10 de agosto de 2017

"Desde la terraza de aquella casa"

"En La terraza de aquella casa"
Desde niño todos los dias al caer la tarde, como los gatos me subía al tejado a contemplar la luna, sin estar enemorado.

Al llegarme la adolecencía, a la par de mi creció la demencia y se fue enraizando en mi corazón. Sin ser poeta poco a poco me fui convirtiendo en ese punto, en el universo, que escribe versos al caer la tarde.

Todos los días me subía a la terraza de aquella casa,  con mi pequeño radio a transistores a escuchar la música cuando al parecer se quedaban dormidos los locutores, mi gato Claroscuro  me acompañaba. Al caer la noche el cielo se tapizaba de estrellas, la luna apenas se levantaba, yo la observaba y la imaginaba como una niña vestida de blanco y con la carita tiznada y el alma eternamente enamorada.

Le escribía versos a la doncella que aún no conocía, pero que sabía que existía y que quizás soñaba con un tipo como yo, con el alma cargada de ilusiones sin estrenar y un corazón que se entrega al amar.

Desde esa terraza, en aquella casa, conté junto a mi gato las estrellas y descubrí sus bellos ojos en ellas, conocí su alma, fue una revelación que se metía en mis venas al escuchar aquella canción.
Oxwell L’bu Copyright © 2017

sábado, 1 de julio de 2017

"La Colonia de la esperanza, 50 años de historia"

a Colonia de la esperanza...50 años de Historia"
(Colonia 1ero de Julio)
Corrían los años 60, la llamada década prodigiosa, ya que la sociedad, la musica, la moda y la política, cambiaron para siempre.

Por aquellos años, en Guatemala, el acceso a vivienda, constituía, un grave  problema para las grandes mayorías; viendo esta problemática, el entonces presidente del país, el licenciado Julio Cesar Mendez Montenegro busco soluciones, que fueran viables y accesibles, es asi como por su iniciativa se desarrolla el proyecto más ambicioso de toda Centro América, para proveer de vivienda digna a un segmento de la población. El 1966 se pone la primera piedra y 11 meses después, un primero de julio de 1967 se inaugura la colonia, haciendo entrega de las primeras viviendas y se le pone dicho nombre, no sólo por la fecha, sino también para honrar a este hombre visionario.



En ese mismo año otros hechos históricos, acontecen en el país, entre los que se pueden destacar: El Novel de Literatura con que es galardonado Miguel Angel Asturias, la muerte del poeta Otto Rene Castillo,  en el fútbol,la selección nacional, se corona campeona del área norte, centro y  el caribe, hoy la Cocacaf en lo que vendría a ser en la actualidad, la Copa Oro
2.



En estos 50 años de la colonia, sus habitantes han escrito, muchas historias, historias que no pocas veces trascienden en el país así como fuera de nuestras fronteras. Historias llenas de esperanzas, que llevan esa lucha por ser alguíen en la vida, historias con las que se podrían escribir una infinidad de libros.



Oxwell L’bu Copyright © 2017

Hoy hace 50 años...

Hoy hace 50 años...
Hoy hace 50 años, nació la colonia de la esperanza, ese pedacito de cielo que fue nuestro campo de recreó, donde nuestos padres nos vieron crecer y correr tras nuestros sueños.

Dios bendiga a nuestros padres por su lucha y coraje y a este pedazo de tierra que es nuestro hogar. Felices bodas de oro a nuestra querida COLONIA PRIMERO DE JULIO LA COLONIA DE LA NUEVA ESPERANZA.

Foto: Manuel Pineda

martes, 27 de junio de 2017

"Cuando Éramos Patojos "

"Cuando Éramos Patojos"
Soy de la generación,  que nació el milenio pasado, esa que era feliz con cosas sencillas, que se volvía loca coleccionando estampillas o jugando con tapitas, cincos o un trompo.

Pues cuando éramos patojos, el tiempo era nuestro aliado y la fantasía dormía a nuestro lado.  Aquellos años tuvieron su encantó, pese a las dificultades que nunca faltan y a una que otra pena, como cuando nos sorprendían tocando timbres o rompimos un vidrio por estar chamusqueando.

Cuando éramos patojos eran tan fácil ser feliz y la amistad siempre iba acompañada por la complicidad en los juegos y las travesuras. A veces no cargabamos ni un centavo, pero nos sentíamos millonarios, llevando en los bolcillos, una navaja oxidada, un par de carteritas de fósforo, un anillo plástico  con poderes incluidos, unos cincos, la mitad de un chicle, la máscara del zorro, hecha con un pedazo de tela.

Cuando éramos patojos, nos pudieron faltar cosas, pero nunca un amigo, nos pudieron faltar juguetes pero nunca imaginación, nos pudo faltar dinero, pero para todos siempre habia, pues lo que había se compartía.
Oxwell L’bu Copyright © 2017
Foto: Paisajes De Guatemala Steve

viernes, 2 de junio de 2017

***El Terruño De Mis Amores ***

***El Terruño De Mis Amores***
Me gusta volver, presiso volver,
al terruño de mis amores...
Allí donde siempre es primavera
y siempre hay flores, cuyo aroma,
se impregna en el alma.

Me gusta volver al terruño
de mis inefables memorias...
Porque allí al encontrarme
con el pasado, este se hace
presente a cada paso.

Me gusta está tierra que me vio nacer,
me gusta porque tiene un color diferente,
porque la llevo en la piel,
porque corren por mis venas,
sus sabias morenas.

Me gusta reencontrarme
con mis raices...
Redescubrir mi cultura
y sus múltiples matices;
me gusta sentir que sigo
perteneciendo aquí
y saber que no fue un adiós,
el día en que me fui...
Oxwell L’bu Copyright © 2017

viernes, 19 de mayo de 2017

***Mi Barrio, Mi Colonia ***

***Mi Barrio, Mi Colonia...***
Cada paso es un suspiro,
cada cuadra, cada calle,
evoca mis memorias,
allí se escribió mi historia.

La colonia ha sido mi barrio,
mi lugar en esté mundo,
allí viví esos maravillosos años,
donde subes y bajas peldaños..

De niño fue mi campo de recreó,
sus cuadras laberintos de aventuras
y mis vecinos mis hermanos,
mi familia...

Allí jugué hasta el cansancio,
allí nunca me falto un amigo,
mi infancia como la de muchos,
fue de intensa felicidad.

En sus escuelas, institutos
y colegios me forjé,
en ellos obtuve lecciones
de vida...

En su iglesia y sus templos,
construimos comunidades
de fe, donde el espíritu se fortalece
y el alma se llena de paz y armonía.

Allí sobreviví un terremoto,
un ciclón  y esos años de represión,
donde en medio de gases lagrimogenos,
nos forjamos un porvenir.

Al llegar la adolecencía,
las esquinas eran esos lugares,
que convocaba a los amigos,
para contemplar a las flores del jardín.

Allí me nació aquel sentimiento,
allí viví aquella primera ilusión,
allí se me alboroto el corazón,
al ver los ojos de una princesa.

En sus calles vi al amor pasearse,
en sus rincones besarse
y al caer la tarde, cuando se
tiende ese manto de estrellas.

El alma evocando cosas bellas,
le daba al corazón  por escribir,
versos inefables que brotaban,
como flores en primavera.
Oxwell L’bu Copyright © 2017

martes, 16 de mayo de 2017

"A La Salida..."

"A La Salida...."
Esgrimiendo miradas desafiantes en su enojó, así los miran de reojo, el resto de la clase....Han dado su palabra, se encontrarán a la hora de la salida, para resolver esa disputa.

Los patojos, juegan juntos, son cómplices de travesuras y aventuras, pero nunca faltan las disputas y por ende las peleas; peleas que se suscitan, por pequeñas razones sin razón: por botar sin querer, queriendo la refacción del otro en el recreo, por un penalti que no fue en la chamusca, por mirar demasiado a la hermana del otro o por disputar quien le llevará los libros al salir a la doncella... O porque simple y sencillamente fulano y mengano, no se pueden ver ni en pintura..

Pero pelearse en las horas de escuela, suponía aparte de los golpes, alguna acción de diciplina, por lo que era mejor resolverlo a la hora de la salida. Y así se pasan contando los minutos, intercambiando miradas desafiantes  y cuando por fin, suena el timbre anunciando la salida, este también anuncia la pelea, en las bancas ya se han organizado las apuestas y como suele suceder, siempre hay alguien que hará las veces de narrador, siempre habrá alguien dispuesto a animar las porras y por supuesto el que hara, de referí  y poniendo su mano al frente les dira: El que escupa primero, dara el primer golpe y el resto formará una rueda, para que nadie interfiera en la pelea.

Los patojos se hagaran a trompadas, a veces corre sangre, pero sin importar quien ganó  o quien perdió, los susodichos volverán a ser amigos.
Oxwell L’bu Copyright © 2017

domingo, 23 de abril de 2017

"El Legado Del Padre Antonio "

"El Legado Del Padre Antonio"
Llegó de España a misionar, sin imaginar que en la colonia, se iba a quedar...

Llegó un mes de abril, con su mirada observadora y su pinta conmovedora,  aquel fraile dominico, cuya vocación era la evangelización, con su acento tan particular y esas ganas de trabajar, por una parroquia, a la que llegó  a amar, quizás tanto como su patria del otro lado del mar.

Era un hombre visionario, que no sólo proyecto sino construyó con sus propias manos, lo que él veía en sus sueños. Llegó a un templo casi inexistente, donde poca gente se sentía convocada a servir. El le dio organización y liderazgo a la parroquia, pese a ser estricto, le dio a sus feligreses la posibilidad de tener  iniciativas. Así poco a poco, se fueron formando, grupos de cristianos comprometidos, con los cursillistas, la legión de María,  la Renovación Carismatica católica entre otros.  Era un sacerdote casamentero, pues a parejas que el sabia, viviendo en libre unión, las motivaba para que se casaran y velaba por la educación religiosa de tantos niños que jugaban en aquel inmenso parque de recreó, que eran las calles de la colonia...Pero además de eso socorrida a los necesitados, no pocas veces se vio, a familias completas en dificulrades, viviendo en la casa parroquial, la cual era también su residencia.

Pero aparte de todo su esfuerzo y trabajo parroquial, el soñaba con construir en la colonia, una especie de basílica, a lo cual dedicó el resto de su vida (y tenía razón, pues en lo que despues, llego a ser el salón parroquial, la gente no cabía). Por otra parte  siento el patrón de la colonia, Jesús Resucitado, él incistia, en que dicha celebración y prosecion  deberían de tener, aún más solemnidad que los demas cortejos prosecionales de la semana santa, pues repita lo que dice, San Pablo: Si Cristo no hubiera resucitado en vano sería nuestra fe.

Fue a finales de los 70's  que el padre se hizo de una pequeña imagen, de Jesús Resucitado,  la cual el ponía  en una pequeña prosecion y  era cargada alrededor del templo, principalmente por niños, el día de la resureccion. Pero el padre Antonio, pensaba que Jesús Resucitado y la parroquia merecían mucho má, fue así que saco aquella pequeña prosecion por las calles, a principios de los ochentas, con la ayuda de feligreses, los cursillistas, la renovación carismática y el grupo scout 51.  Para mediados de los ochentas, padre Antonio mando ha hacer una imagen, de tamaño mayor, en los talleres de Don Julio Dubois. Por esos años el grupo de Renovación, con ayuda de vecinos entuciastas iniciaron la tradición, de hacer alfombras, que se extendían en todo el paso por las calles de la colonia

Han pasado los años y el legado, del Padre Antonio, así como su visión, sigue encontrado eco en las nuevas generaciones, pues aparte de mantenerse viva, va creciendo y haciendose más solemne y significativa dicha celebración, pero más que eso, esa comunidad de fe a la que é, le dio liderazgo y sobre todo su trabajo incansable, sigue viva.
Oxwell L’bu Copyright © 2017

domingo, 19 de marzo de 2017

***¡ Sé Feliz! ***

***¡Sé Feliz! ***
¡Sé feliz!  Sin ese narcisismo
que apaga la hoguera
y acaba en egoísmo;
¡Sé feliz! Con esa alegría
que se derrama como empatia,
porque la felicidad compartida,
es doblemente vivida.

¡Sé feliz! No busques el entretenimiento,
que solo te distrae de la vida,
no mates el tiempo en cosas sin sentido,
no olvides que cada latido cuenta,
porque cada uno es un milagro.

Sé feliz!  Pero que tu felicidad,
no sea circunstancial,
sino que burbujee por tus
venas cual agua mineral,
impulsada  por todos esos
anhelos que llevas en el corazón.

¡Sé feliz! Pero no pongas tu felicidad,
en cosas que a la larga no valen la pena,
cosas que son perecederas y pasajeras,
no te amares a las posesiones,
atesora esas pasiones,
que solo pueden provocar,
la amistad y el amor.

¡Sé feliz! Sin pretender apropiarte,
de la vida de las personas,
recuerda que ellos también
son peregrinos y al igual que tú,
están de paso por la vida.

¡Sé feliz! Sin idealizaciones,
no esperes nada perfecto,
porque lo perfecto es inhumano;
no olvides que todo tiene
un costo de oportunidad
y por eso no hay dos glorias juntas.

¡Sé feliz! Compromete con ello,
porque quien es feliz,
no anda jodiendole a nadie la vida,
por lo contrario es feliz con el pan diario,
tiene gratitud en el corazón  y va sembrando
flores por la vida...¡Sé feliz! .
Oxwell L’bu Copyright © 2017

miércoles, 15 de marzo de 2017

***Sin Restricciones De Tiempo***

***Sin Restricciones De Tiempo***
Cómo espero ese momento
en que dan las seis,
el momento mágico para irte a ver.

Porque todo mi día gira
en torno a ese momento,
el momento en el que mi día
se llena de la luz de tú presencia.

Va cayendo la tarde y tiende
su manto sobre la cúpula de la iglesia,
empiezan a doblar las campanas,
como anunciando nuestro encuentro.

Yo me apresuró, corro hacia ti,
con las ancias del niño que espera
con las ganas del adolecente demente,
con la prisa de quien desepera.

Nuestros encuentros tienen la magia
de la sencillez, el encanto de lo significativo,
pero sobre todo ese toqué sublime
de tu presencia.

Pero las horas son tan cortas,
los momentos tan efímeros,
será por eso que siempre tengo
ser de ti...

Sed de tus besos, de tus caricias
pero sobre todo de esos momentos
que son tan nuestros pero que se nos escapan
así tan de repente.

Sera por eso que amanezco
contando las horas
que me separan de ti
y vivo sólo para ese encuentro.

Y me pregunto cuando
sera ese día  en que el tiempo
deje de ser nuestro verdugo,
cuando sera ese día sin despedida.

Cuando el tiempo nos dejará
de restringir y podamos al fin vivir,
esas cosas sencillas que nos
hacen el día...
Oxwell L’bu Copyright © 2017