jueves, 19 de septiembre de 2019

Al dar las seis...

Al dar las seis...
Al dar las seis, las calles se quedaban desiertas, las tareas escolares debía de haberse concluido y en las casas no se escuchaba ningún ruido, porque era la hora del Zorro...

El Zorro la serie que mi generación esperaba y era la única razón, por la que uno deseaba, después de un fin de semana, que fuera lunes, para poder volver a ver una semana más del héroe de todos.

Pero luego que finalizaba, más de algún patojo, una máscara improvisaba y con un palo de escoba, se hacía una espada y empezaba de espadiar, aunque fuera contra el poste.
Oxwell L’bu copyrights 2019

miércoles, 18 de septiembre de 2019

“Cuando las chicas se iban de capiusa”

“Cuando las chicas se iban de capiusa”
No era común, ver a las chicas de capiusa, pero cuando lo hacían, siempre andaban en grupo o con el novio, que a base de ruegos las convencia.

El vaivén de sus faldas escolares, las medias arremangadas y sus caritas de margaritas asustadas, las delataban, no era que no hubieran clases, no era que habían salido temprano, era que se habían escapado, ya sea con su enamorado o con sus amigas.

Y contrario a los varones, que se iban de capiusa, para ir a jugar a las máquinas de videojuegos o para meterse al cine o jugar una chamusca con su cara de asustados, ellas lo hacían sin pena y se les veía en la sexta o los centros comerciales, vitriniando o comprando joyas de fantasía o baratijas en los bazares. Siempre en grupos de tres o más, siempre con esa mezcla de coquetería y timidez.
Oxwell L’bu copyrights 2019

martes, 17 de septiembre de 2019

“Grabar para recordar”

“Grabar para recordar”
Los discos de acetato, siempre venían con el retrato, del artista o la agrupación y en el mismo, en ocaciones no había más que un par de canciones de las que uno gustaba, las demás eran de relleno.

Pero cuando llegaron los cassettes, eso fue otra historia, porque en ellos existía la posibilidad, de gravar la música que a uno realmente le gustaba y en el orden que uno quería, ya fuera prestando los discos o cassettes de fábrica o desvelándose, para grabarlo, con la música de la radio, rogando a Dios por que se quedara, dormido el locutor.

Quién no pasó noches de desvelo, para grabar un cassette, para la dueña de su corazón, donde cada canción expresará sus sentimientos. Quien no espero con ansiedad, el programa archivo tropical, para grabar la música para las fiestas de fin de año.

Si, ahora son cosas de antaño, pero que cuando uno las recuerda, les parece que fue ayer y por alguna extraña razón, vuelve a sentir esa misma emoción.
Oxwell L’bu copyrights 2019

viernes, 6 de septiembre de 2019

***Y me quede esperando***

***Y Me Quede Esperando...***
Vi pasar los segundos, los minutos,
las horas, los días, los meses,
los años...El tiempo se hizo nada,
o es que el amor es efímero
y el olvido eterno.

Más yo me quedé esperando
a que llegará el olvido,
pero esté nunca llegó,
o sería que un sentimiento
lo desvio, o el se equivocó,
o busandome no me encontró.

Y me quedé esperando otros amores,
pero nunca llegaron  o sería  que
se eclipsaron al ver la intensidad,
con que aún brilla tu rreuerdo.

Me quedé abrazado a la soledad
y si bien es cierto  nunca consiguió
darme consuelo, me enseñó
a vvivir sin ti,  más sin olvidarte,
pues sólo con tigo conseguí
ser feliz ...

Me quedé arrullando recuerdos,
que nunca quisieron madurar
y prefirieron quedarse  gravitando,
en esa fantasía que nunca les diria,
que tu todo lo olvidaste.
Oxwell L’bu Copyright © 2016

jueves, 5 de septiembre de 2019

“Una Francia que delata”

“Una fragancia que delata”
En el afán de ocultar, muchas veces se suele evidenciar, lo que se quiere ocultar...

Ya fuera Por antojadizos, por travesura o premura. o por sentirse ya mayores, los patojos empezaban a fumar o bien a tomar. Casi siempre solía suceder, para los días de navidad, su cumpleaños o simple y sencillamente porque querían probar. Pero la estocada de la primera cerveza o el primer trago siempre pone en evidencia, al novato inexperto, lo mismo suele suceder con el primer cigarrillo el tufo se impregnadoen la boca y para “ocultar su pecado” el patojo desahuciado, acudía a mascar chicles y mejor si eran, los llamados Fragans, cuya fragancia, particularmente exagerada, siempre solía levantar sospechas en los padres.

Y allí estaban los patojos, masca que masca chicles, con cara de asustados, era una forma de lavar su pecado, pero al llegar a casa, esa fragancia que ocultaba la evidencia, pero levantaba sospechas. Y allí estaban las mamás oliéndoles la ropa, tratando de encontrar la evidencia, para reclamarles su inconsciencia.

Los mentados chicles, no solo eran los aliados en las estocadas, también cuando andaban de conquista, pues no les bastaba cepillarse los dientes hasta 5 veces, estos chicles parecían darles ese toque de seguridad, aunque en verdad, su particular fragancia, era sinónimo de una estocada, disfrazada,
Oxwell L’bu copyrights 2019