“Del amor y la amistad, en tiempos de la Colonia”
Quien si pudiera comprarse un boleto al pasado, no volvería a esos días, en que la amistad era un regalo que se atesoraba y el amor, un momento mágico e inolvidable.
Por aquellos años, la música era incondicional compañía en la vida. Las canciones de Roberto Carlos, de Camilo Sesto, de Guillermo Dávila, Alux Nahual; en inglés Wham!, Christopher Cross entre otros, acompañaba nuestro crecimiento, así como nuestras primeras ilusiones.
En aquel barrio tan feliz, donde legiones de niños irrumpían en sus calles de casitas iguales, la amistad era una riqueza abundante, que se valoraba, porque esas amistades tenían el sello de para siempre... No era solo compartir los juegos, era ir a la escuela, a los scouts o pertenecer al mismo equipo de fútbol. Era ver a las chicas aventajarnos en madures y estatura y verlas como rosas en botón que poco a poco se abrían a la vida.
En esos años de la Colonia, eran tan fácil pasar de la amistad al amor; un amor puro e inocente, entre gente decente... Si esas calles hablaran, es seguro que narraran los episodios más bellos de nuestras vidas, es seguro que allí están guardados los primeros suspiros de las doncellas, ese primer palpitar sin poderlo controlar al ver a aquella chica, sin poder disimular esa amor que como nube empezaba a flotar...
Ah! Si en esas calles se volvieran a despertar, esas ilusiones dormidas; nuestros primeros repasos, perdiendo el paso al bailar; si se pudiera pasar, algo así como una película, cuanta alegría saldría de ella como una aura de felicidad.
En aquellos años en la Colonia, en verdad que derroche de felicidad, cuantos recuerdos, cuantas alegrías, que, que no daría para volverlos a vivir...
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#Delamorylaamistad
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