“Al amanecer en Navidad”

 “Al amanecer en navidad”

Luego de una noche de tamales, de ponche, de regalos y una oración al Niño que acababa de nacer y la quemazón de cohetillos al dar las dice, los patojos esperaban el amanecer…

Se levantaban temprano, la mañana de navidad, con una bolsa en mano desde muy temprano recorrían las calles de la Colonia, en busca de los cohetillos que no habían reventado a las 12 de la noche.

Recogían cuánto cohetillo, encontraban, luego se juntaban en la cuadra; entraban a sus casa a sacar su arsenal, emocionados como agua mineral.  Los canchinflines, los cañones que habían hecho fabricar y como pulgas empezaban a brincar.

Se ponían en cada extremo de la cuadra, en dos bandós, que empezaban a guerrear, esa era su forma de celebrar.

Y allí se veía a los patojos en la guerra de cohetillos y canchinflines, guerras que hoy son un recuerdo, eso es lo que recuerda un veterano  da esas guerras en las cuadras…

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#canchinflines

“Las guirnaldas en comunidad”

 “Las guirnaldas en comunidad”

Aún en la dulce espera, el corazón desespera por ver al niño nacer…

El primer domingo de adviento, marcaba el inicio de la celebración de las guirnaldas de adviento, en particular en la parroquia, donde el grupo de los carismáticos se dio a la tarea de darle realce a esta tradición de la iglesia. Durante las cuales acompañamos la dulce espera de la madre del Redentor.

El grupo tenía 16 comunidades diseminadas en toda la colonia; la comunidad camino verdad y vida, tenía el sector de la 5ta Ave. a la 5 Ave. E de la 16 a la 17 calle. Como comunidad se celebraban los tres domingos de adviento en dicho sector, realizando las llamadas guirnaldas de adviento, las cuales concluirían, con la plenaria de guirnaldas en la iglesia el último domingo.

“Las guirnaldas en comunidad”

Aún en la dulce espera, el corazón desespera por ver al niño nacer…

El primer domingo de adviento, marcaba el inicio de la celebración de las guirnaldas de adviento, en particular en la parroquia, donde el grupo de los carismáticos se dio a la tarea de darle realce a esta tradición de la iglesia. Durante las cuales acompañamos la dulce espera de la madre del Redentor.

El grupo tenía 16 comunidades diseminadas en toda la colonia; la comunidad camino verdad y vida, tenía el sector de la 5ta Ave. a la 5 Ave. E de la 16 a la 17 calle. Como comunidad se celebraban los tres domingos de adviento en dicho sector, realizando las llamadas guirnaldas de adviento, las cuales concluirían, con la plenaria de guirnaldas en la iglesia el último domingo.

Aquello era una verdadera fiesta, entre callejones, una celebración de la fe, en la que se compartía el significado de aquella espera y se profundizaba sobre el sentido de la navidad, ya próxima. En la comunidad aquel grupo de jóvenes, adultos y niños unían esfuerzos para hacerla especial.  Se decoraba el área donde se realizaría(la cual se combinaba con el adorno que ponían los vecinos en las cuadras), se iluminaba bien el lugar, se preparaba ponche de frutas y algún refrigerio, pero sobre todo se compartía como comunidad.  Era una celebración a la que todos estaban invitados y todos eran bienvenidos.

Aquella exigía mucho trabajo, el cual se realizaba con alegría  de parte de los servidores y colaboradores, aquello marcó una bella tradición donde con la Madre esperábamos en comunidad el nacimiento del Redentor.

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#Guirnaldasdeadviento

#Adviento 

“Con anticipación para la ocasión”

 .“Con anticipación, para la ocasión”

En aquellos años, antes de que el comercio, impusiera su agenda comercial, para despertar el ansia de comprar, los patojos se iban a barranquear para aventurar y tener todo listo con anticipación, para la ocasión.

El tiempo navideño iniciaba con la quema del diablo, justo en la víspera de la a inmaculada y para dicho evento, los patojos con el corazón contento, se iban con la seriedad del caso, con machete en mano a barranquear, en busca del mentado chirivisco. Aquello era toda una aventura y sin premura, los patojos de la cuadra se adentraban a los barrancos(el de la Guacamayas y el de Lode Bran), cuando por los mismos corrían aguas cristalinas, aprovechaban para darse un chapuzón   y no faltaba quienes al regresar de dicha aventura llevaran en el cuerpo las marcas y salpullidos de los besos de la planta, llamada chichicaste, así como todo tipo de espinas clavadas en la ropa.

Pero todo eso no importaba, porque la aventura valía la pena; luego el mentado chirivisco era almacenado, en los techos de duralita de las casas, para esperar ese día, que también era inolvidable y con el que iniciaba la época navideña.

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Foto: Héctor Gaitan Alfaro

#Quemadeldiablo

“Ildefonso Morales Reyes”

 .“Ildefonso Morales Reyes (DEP)”

No basta con ser aficionado, hay que ser apasionado, no solo para promover, sino también para mover a los jóvenes a la disciplina y el deporte.

Ildefonso Morales Reyes, más que un vecino de la Colonia, fue un hombre que supo promover el deporte en la misma. Uno de los fundadores de la liga de fútbol en la Isla.

Se le veía en su mini van Volkswagen llevando y trayendo a los patojos a los entrenamientos y partidos, así como los balones y los utensilios que utilizaba en los entrenamientos.

Su equipo, el Huracán, en el cual jugaron muchos grandes jugadores, que hoy son referentes, como su hijo Homero Morales.

De esa semilla que sembró, hoy pueden verso los frutos no solo en la Colonia, sino en la vida de los jóvenes, que hoy son ciudadanos de bien.

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Fotos: Oswaldo Morales

#Futbol

“El fútbol en la Colonia”

 “El fútbol en la Colonia”

Si hay un argumento que de para hablar y escribir indefinidamente, es el fútbol, que desde los inicios de la Colonia siempre fue un tema candente.

Desde las chamuscas en las cuadras, la liga de mosquitos, la liga menor y mayor y los que han sido referentes del buen fútbol en la Colonia, hay mucho que decir y escribir.

Pues el fútbol en la Colonia ha despertado y sigue despertando pasiones, no en balde, aunque muchas áreas verdes la municipalidad e intereses privados los han desaparecido, los campos de fútbol siguen siendo intocables, tanto los campos en el corazón de la Colonia (15 y 16) como los de la Isla.

Son muchos los equipos y no digamos las legiones de patojos que han desfilado por dichos equipos, que mencionarlos a todos sería interminable, pero mencionaremos a algunos no porque sean los únicos, sino porque suelen ser los más recordados: El independiente, Huracán, Varsovia, Klase 15, Sporting, El Orange, Estudiantes, Tappan, Juventud, Atlético 14, Esfuerzo, Torino, Los Incógnitos de la Isla, Kerns, entre tantos.

No se puede tampoco dejar mencionar a quienes con su entusiasmos y medios económicos, formaron y entrenaron a dichos equipos como Don Cano, don Idelfonso Morales Reyes(DEP en la liga de la Isla), Danilo Culajay entre muchos.

Realmente el fútbol siempre ha sido el deporte por excelencia de la Colonia prueba de ello, es que tantos los equipos de la liga mayor de fútbol del país, así como la selección nacional se han nutrido con el talento de jugadores de la Colonia.

Y cómo dejar de mensionar a los aficionados, a los que se apasionan desde los graderíos y los alrededores de los campos, por que sin ellos esa pasión desbordante sería silencio, se recuerdan a aficionados que domingo a domingo decían presente como a doña Guichita y don Manuel Jiménez(DEP).

El fútbol seguirá dando no solo de que hablar en la Colonia, sino también frutos con sus buenos jugadores.

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#Futbol

“Los barriletes en la Colonia”

 “Los barriletes en la Colonia”

Dejarlos volar, para luego mandar mensajes al cielo…

Cuando llegaba el mes de noviembre en la Colonia, las calles se convertían en jardines de recreo, pues legiones de niños y adolescentes salían de vacaciones, el ciclo escolar había concluido. 

Y allí se miraba a los patojos, yendo al barranco de las Guacamayas para cortar cañas y así poder armar su barrilete.

El grupo de los carismáticos de la parroquia Jesús Resucitado, el cual contaba con legiones de niños y jóvenes adolescentes en sus filas, organizó durante varios años, allá por los ochentas, un concurso de barriletes, cuyo propósito era el de evangelizar, pues cada barrilete debería llevar un mensaje cristiano. Fue así como las 16 comunidades se sumaron, al igual que vecinos y otros grupos entusiastas a dicha actividad.

De tal suerte, ese día se tapizaba el cielo de la Colonia con muchos barriletes de colores y la alegría de los niños hacia una fiesta.

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Fotos: Victoria Emelina Pérez 

#Barriletes

“Convivencias…”

 Convivencias…

Hay cosas en esta vida que no se olvidan, que permanecen intactas en la memoria, porque son parte de nuestra historia.

Aunque no pueda narrar, la historia oficial del Pulpo Zurdo, como tal, recuerdo que inició a fines de año, allá por mediados de la década de los ochentas, cuando con Lacho, así como otros vecinos y amigos, iniciábamos nuestros estudios universitarios, en la da facultad de ingeniería, quien lo diría.

Estudiábamos por las mañanas y  al caer la tarde se miraba a Lacho y Kiko preparando la churrasquera y demás para abrir el lugar.  Sin importar el día de la semana, la muchachada se daba cita a aquel lugar, que sin propaganda, ni invitación(al igual que los repasos) atraía a la patojada de la Colonia.  No era solo el aroma de la carne o la música(que nunca tenía un volumen intolerable, por respeto a los vecinos) era ese ambiente y las convivencias que se compartían en aquel lugar.

La alegría de sentarse a conversar, a bromear o a platicar sobre el partido de fútbol o el tema interminable de los jóvenes, las muchachas.

Muchachas que iban de niña a mujer y cada día se multiplicaban aquellas flores que adornaban las calles de la Colonia.  Si aquellas paredes pudieran hablar, cuantas historias podrían contar, porque en ese lugar han quedado muchas de nuestras memorias, quizás de las más bellas y celebradas de la vida.

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#Convivencias

“Esperando las tortillas “

 .“Esperando las tortillas”

No,no habían sillas, sino una cola esperando las tortillas y te entretenías, no mirando el celular, sino platicando u observando la destreza de quien tortiaba…

Mientras los patojos retozaban en la calles, jugando, saltando, silbando, gritando, mamá preparaba el almuerzo o la cena y cuando ella, calculaba que faltaba poco para que todo estuviera listo, con una servilleta y con pisto en mano, salía a llamar al patojo para que fuera por las tortillas.

Y allí estaba la larga cola de otros esperando, mientras doña María, hacía las tortillas. No faltaba la señora que se ofreciera para ayudar y se pusiera a tortear, pero quien como doña Maria, para hacer las tortillas, le salían redonditas y todas del mismo tamaño y proporción, en cambio a quien se metía a ayudar, deformes y hasta se les solían quemar.

Es que doña Maria, tenía su arte para tortear, se humedecía las manos en un guacal, luego tomaba la maza entre sus manos y con un sonido muy particular, formaba la tortilla que luego ponía en el comal, un comal de leña, que de vez en vez hacía llorar a quienes esperaban con impaciencia, debido al humo que despedía. Y su habilidad para darle vuelta a las tortillas sin quemarse era insuperable, que uno se ponía a pensar, que sus manos eran inmunes a las quemaduras.

El aroma de las tortillas recién hechas era tan particular y su sabor insuperable, por eso aquella espera, con humo en tus ojos, valía la espera, pues es algo muy difícil de olvidar.

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#Tornillería

“Desfilar con la escuelita”

 “Desfilar en la escuelita”

Como flores en los jardines de eternas primaveras, brotan los recuerdos de aquellos años maravillosos en la escuela...

Desde niños, en aquellos lunes cívicos, se nos inculcaba ese amor natural, que todo ser humano tiene y siente hacia ese pedacito de suelo que lo vio nacer y despertar de sus primeros sueños, ilusiones y aspiraciones.

Por lo que cada mes patrio, ese fervor como antorcha al viento se inflamaba y uno deseaba, poder participar de aquella celebración. Las calles de la Colonia se limpiaban y encalaba para aquella ocasión, no faltaban las casa adornadas con flecos y moñas azul y blanco como nuestra bandera, así como los símbolos patrio.  Y allí iban los patojos, en el circuito principal de la Colonia desfilando, en sus respectivas escuelas, orgullosos e ilusionados. Sus padres tomándoles fotos y aplaudiendo su participación, pues era la forma de ir construyendo una gran nación... Algunos dirán que aquello sólo era una pérdida de tiempo, pero por sus frutos se conoce el árbol y en aquellas primeras generaciones de la Colonia, aquello dio frutos y frutos en abundancia. Hoy muchos de ellos son ciudadanos responsables, profesionales que aportan al país y padres de familia que siguen inculcando ese civismo.

Es que desfilar con la escuelita, era todo un acontecimiento, recorrer las avenidas principales de la Colonia y pasar saludando a las dos hermosos Ceibas que hasta el día de hoy siguen abrigando en su sombra los sueños de las nuevas generaciones.

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#Guatemalabicentenario

#IndependenciadeGuatemala

“Cosas de la generación tortrix IV”

 “Cosas de la generación tortrix IV”

(Los DJs)

Quien no recuerda los repasos, dichos repasos no faltaba quien en vez de ir a bailar, su mayor alegría era ir poniendo la música y hasta cierto punto amenizar la fiesta.

Para los años 70’ los llamados DJs empezaron a hacer personajes inflatables, salen al mercado las primeras tornamesas dobles y mezcladoras, lo cual permitía una mayor habilidad para mezclar la música y desarrollar ciertas técnicas. 

Pero es en los 80’s que el DJ toma un lugar protagónico en las fiestas y discotecas, ya que deja de ser un mero animador y pasa a hacer quien le pone el ritmo a la noche…

Es así como técnicas desarrolladas por DJs como Francia Grasso, pasan a hacer técnicas obligadas que todo DJ debe manejar. Técnicas como Be at machine, que consiste en modificar la velocidad de reproducción, para de esta forma acoplar la próxima canción o el Slip cue ting que consiste en sostener el disco y soltarlo en el momento precisó. También la llamada Merry Go round, de la cual se habló en el post anterior.

En USA discotecas como Studio 54 hicieron de los DJs súper estrellas de la cultura pop. En Guatemala fueron los hermanos Alcazar de RCN, de los primeros en montar una disco rodante empleando a los mejores DJs aquí cabe destacar que Music Power prácticamente se estrenó, para el 25 aniversario del instituto Adolfo V. Hall central.

En la colonia, donde los repasos eran actividades recurrentes, también fue evolucionando la forma en que se desarrollaban los mentados repasos; es así que surgen los DJs entre los que se recuerda, Erwin Rivera(Quien amenizaba y hacía las mezclas para las fiestas de la renovación), Lisinio Martínez quien fundará Happy Disco, René Alvarado así como Carlos Guate DJ quien actualmente es fundador de la compañía Guate DJ entertainment Inc. en Chicago y ha participado junto a grandes artistas como Wilfrido Vargas y Jossie Stevan entre otros,

así que: que siga la fiesta…

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#DJ

“Cosas de la generación Tortrix III”

 “Cosas de la generación Tortrix III”

(Breakdance)

El breaking dance se inició en los años 70’s en el Bronx New York y de allí se expandió a muchas ciudades del mundo.  Es un baile que realizaban los llamados B boys and Girls y forma parte de la llamada cultura Hip Hop, en cuya música destaca la percusión y el bajo.

En los años ochentas, se popularizó el llamado Breakdance o baile callejero y esto gracias a películas como Flashdance, Breakdance entre otras y esto debido a que era un baile que para realizarlo se debería realmente estar físicamente en excelentes condiciones, debido a sus movimientos dinámicos y acrobáticos.

En la Colonia, así como en muchos barrios, se veía a los muchachos ir con sus grabadoras y de repente, ponían unos cartones, sobre la acera y se ponían a bailar, haciendo una especie de retos entre ellos, para demostrar la forma en que bailaban y poco a poco se iban sumando más jóvenes ya fuera para verlos o para bailar.

La Colonia tuvo entre sus mejores representantes de este baile a Julio Castillo Rosales y César Molina Mijangos, quienes participaron en competencias a nivel nacional e internacional y más de una vez fueron invitados a los canales de televisión.

Para este tipo de baile, los llamados DJ buscaban extender algunas partes de las canciones y esto lo conseguían, usando dos tornamesas en las que ponían el mismo disco de acetato, técnica a la que se le llama Merry Go Round.  

El break dance, dejó huella en la generación Tortrix y es parte de esos recuerdos, que se anhelan y que se quisieran volverla vivir.

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#Breakdance

“Cosas de la generación tortrix”

 “Cosas de la generación tortrix II”

(Los teléfonos públicos)

Tener teléfono en casa, era un lujo que no todos se podían permitir, por lo que había que salir y esperar…

En esa espera que desespera, uno redoblaba el paso para llegar primero y no tener que esperar, pero como suele pasar, para uno que madruga hay otro que no duerme y no quedaba de otra más que llenarse de paciencia y hacer cola como quien hace penitencia.

En aquellos años el tener teléfono en casa, no solo era un lujo, pues había que tener contactos en Guatel para que tomaran en cuenta la solicitud, en virtud, de que las líneas telefónicas eran limitadas.

Y allí en la cola, uno sin querer escuchaba conversaciones ajenas, se enteraba de las alegrías y penas, de los romances que empiezan y de los que terminan, de los secretos mejor guardados, de los chismes acomodados, que cuando por fin llegaba tu turno a toda costa tratabas de que nadie escuchara tu conversación, pero la persona al otro lado te decía: No te escucho, por lo que al final hasta el chucho, se enteraba…

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#Telefonopublico

“Cosas de la generación tortrix”

 “Cosas de la generación tortrix”

(Mensajes de ilusión)

Si, en esos tiempos no había mucha tecnología, pero nos sobraba imaginación…

La generación tortrix, no es una generación cualquiera, pues la reconocerá por su creatividad y alegría desbordante. Cuando nos enamorábamos, había que ver lo que uno era capaz de hacer…

Esos mensajitos en papel, que iban de mano en mano, donde se vertían los sentimientos y luego se doblaban como quien hace juramentos.  Si, es que teníamos detalles y en la vida “allí está el detalle” porque hasta lo más simple lo convertíamos en algo sublime, que hoy son hermosos recuerdos…

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#Lageneraciontortrix

“Una Colonia con personalidad”

 “Una colonia con personalidad”

Desde antes de nacer, la vida quiso reconocer, que de este pedacito de cielo, saldrían generaciones, que no se dejarían vencer…

Si, la Colonia siempre ha tenido sus detractores, que lanzan sus tractores de criticas para desprestigiarla; desde limonada mejorada, a zona roja, pero lo que no saben es que esta patoja, sigue pariendo hijos con color esperanza.

Ya que por sus calles no solo han soñado, sino a base de lucha han logrado muchos sus sueños. Ha sido cuna de grandes atletas, músicos, escritores,de destacados profesionales y de personas que han aportado al país en todos los ámbitos sociales.

Si, como en todo canasto de frutas, nunca han faltado las excepciones (que aunque son minoría, son las que realzan los medios de comunicación, por eso del reiting) pero hablando en honor a la verdad, que Colonia puede presumir a tantos de sus hijos que siguen poniendo su nombre en alto.

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#Colonia1erodeJulio

“Mynor Lemus Ferro”

 “En memoria de Mynor Lemus Ferro”

Si esos campos pudieran hablar, si cuando sopla el viento y levanta la arena dormida, despertará a los recuerdos, todo eso lo volveríamos a vivir y a compartir, con los que partieron…

Mynor Lemus Ferro, “El negro” como le llamaban, jugó en esos campos y despertó pasiones por ese deporte que siempre amo; jugó en el Deportivo Ferro, así como en el Maya Quetzal y como profesional en el club Aurora.

Son muchos los recuerdos y vivencias que deja tras de sí… Descanse en Paz nuestro amigo y vecino, “El Negro Ferro” y paz y resignación a su familia.

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#Futbol